Veni, vidi… VICI!

Hoy no es el día mundial contra el cáncer de mama. Pero hoy, hay muchas mujeres que pueden decir que lo han vencido. Es el caso de Marta, una joven compañera de trabajo a la que hace casi un año que se lo diagnosticaron.

El primer día que nos lo comentó se vino abajo, estaba asustada. Totalmente comprensible. Aunque se lo detectaron en un estado muy incial; suerte. Pero siempre ha sido muy fuerte, muy positiva y tenía muy claro que saldría de esta. Y así ha sido.

Meses de lágrimas, de cansancio, de pruebas, de caída del cabello, una operación, quimioterapia y radioterapia, recuperaciones… Pero siempre con el apoyo incondicional de la familia, los amigos y las asociaciones. Tan importantes en estos momentos.

Ahora ya está limpia. Hoy nos ha venido a visitar y lleva un pelo cortísimo; pero ya es SU pelo.  Guapa y coqueta, como ella ha sido siempre, irradiaba felicidad e ilusión. Sin perder nunca la sonrisa, su tesón y su cumplimiento para con sus obligaciones.

Esta fortaleza, que seguro se ha venido abajo en algún descuido, la ha llevado hasta aquí. Así que nos alegramos enormemente por ella y por todas las Martas que hoy salen a caminar directas hacia un futuro soleado por delante.

Vamos al parque

Hoy he llevado a mi hijo de un año al parque y creo que él era una de las personas más maduras que había en el lugar.

Hemos llegado sobre las 12h de la mañana, estaban allí dos madres, un abuelo y una abuela. Hablaban de panaderías de la zona y yo me he dicho <¡Qué bien! vamos a hacer amigos hoy> así que les he empezado a sonreír y acercarme. Todo iba bien cuando, de sopetón, ha llegado una de las madres con un niño agarrado en cada mano. Para no liarnos, les pondré motes. Esta era «la chillona», la otra madre será «la despistada». Total, que llega la madre chillona con el hijo de la despistada en una mano y con su propia hija en la otra. Como una furia, lanza al niño contra su madre y empieza a chillarle cosas como «¡qué se a creído este niño!», «¡Ha tirado a mi hija al suelo de un manotazo y mi hija sólo tiene un año!» y otra vez al niño: «¡Tú qué te has creído!» y siguió chillando al niño de 2 años hasta que la despistada se despierta y se da cuenta de la situación. La despistada empieza a intentar defender a su hijo diciéndole a la chillona que no puede agredir a su hijo así, que lo que ha hecho está mal pero que lo que está haciendo ella también…

A todo esto se mete el abuelo sevillano, que comienza a proteger a la despistada desaprobando la conducta de la chillona y diciéndole «¡no me hables, habla con ella!» y añadiendo «pero lo que has hecho está mal». Las dos madres siguen discutiendo cuando el abuelo sevillano se dirije a mi: «el problema de las madres de hoy en día es que sois demasiado apegadas» y sin que yo salga de mi asombro me suelta «porque seguro que no te parece bien que se peguen a los hijos», yo le doy un no rotundo con una sonrisa de complicidad porque entiendo que a los abuelos de hoy en día les choque el concepto «respeto hacia los hijos»; y él, amparado por mi sonrisa, sigue: «pues una hostia bien dá a tiempo, hace milagros. No digo en la cabeza, ni en la cara… pero ¿en el culo? ¡anda que no va bien!».

Entonces, se va la madre despistada con su hijo llorando en brazos y, acto seguido, también se va el abuelo. La madre quillona sigue allí, pero bastante más calmada. Yo intento que mi hijo no se acerce un pelo a la suya, pero ella ¡venga a arrimarlos! Cuando decido que nos vamos, me doy cuenta que la abuela que quedaba en el banco (y que, por cierto, era la madre de la chillona) estaba la mar de tranquila con toda la prensa que yo había comprado en sus rodillas, leyendo la revista El Jueves que me había comprado, doblando mis páginas…  y yo pensé «¿A qué madre me quejo yo de esta abuela maleducada?»

En definitiva, he aprendido mucho hoy: el parque infantil no es un sitio en el que no hay que despistarse ni un momento.

Mi Jefe es un Psicópata, el abuso moral en la vida cotidiana

Esta mañana leía un artículo en Marketing directo sobre la psicopatía en ambientes laborales, justo hace un par de años me leí un libro de Mary France Hirigoyen sobre El Acoso Moral en el Trabajo, buenísimo. Aquí tenéis un link al libro completo.

Bien, en el artículo de Pablo Dachefsky comentan el libro Mi jefe es un psicópata de Iñaki Piñuel, en una de sus páginas nos abren una ventana a la amplia definición y situaciones en las que nos encontramos con un psicópta «el psicópata, no solo porta un hacha en su mano como arma letal para cortar en pedacitos a sus víctimas, muchas otras veces utilizan un arma aún mucho más peligrosa: su poder.»
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Como asesinos de guante blanco, muestran una cara extremadamente amable, seductora y encantadora hacia la sociedad, pero que en lo más profundo de su ser, son capaces de llevar de forma inmejorable tanto a las organizaciones como a las personas que le rodean al sufrimiento y al desastre más extremo.

Esto me recuerda el post que escribí hace unos meses sobre el análisis psicológico de la persona perversa
Todos hemos tenido cerca en algun momento una persona “seductora”, alguien que intenta por un lado hacer sentir especial al que tiene delante, deleitarle con sus encantos, a veces las formas de seducción pasan por diferentes etapas y estados.

Efectivamente éste es el punto de unión entre ambos perfiles, el seductor profesional que trata de embaucar y puede acabar incluso humillando y despreciando con tal de conseguir «objetivos» y la persona seductora que a base de sus encantos y su aparente debilidad acaba chupándote toda la energía.

Como muy bien subraya Pabo Estos individuos saben perfectamente qué es lo que tienen que decir a cada uno de los integrantes de la organización para caerles bien y hacerse rápidamente con su confianza, son aquellos que saben ver (de primera mano) de “que pie cojea” cada uno, y gracias a ello, van construyendo el argumento que le permitirá sacar el mejor provecho personal de cada uno.

Aquí no puedo dejar de pensar en la canción de La Mala Rodríguez, Nanai hacéis muy buena pareja, tú le pegas y ella se deja…

Justo ocurre esto, Mary France Hirigoyen comenta que nunca conseguirás nada aguantándote al lado de un psicópata, lo más que puedas conseguir es conocerte a tí mismo un poco más. Pero lo mejor que hay que hacer es alejarse y sobretodo aprender a levantar alarmas a sus signos y verles venir. Además es MUY importante no darles ningún tipo de pistas sobre tu vida personal, ni gustos ni disgustos, no reirles las gracias, algo así como cubrirte de aceite para que todo lo suyo te resbale, y si puedes hacerte invisible a sus ojos.

Pero, ¿qué ocurre cuando éste psicópata está dentro de tu familia, es uno de tus mayores allegados o es tu jefe? Entonces habrá que dotarse de un buen chubasquero y unas dotes de escapismo inteligente; pero vamos a comprar el libro de Iñaki y os contaremos más adelante vía post.

Y ¿cómo podemos identificar éstos signos que nos lanzan? Pablo indica que hay 16 puntos básicos según el psiquiatra Hervey Cleckley (características típicas de los psicópatas)

  1. Inexistencia de alucinaciones u otras manifestaciones de pensamiento irracional.
  2. Ausencia de nerviosismo o de manifestaciones neuróticas.
  3. Encanto externo y notable inteligencia.
  4. Egocentrismo patológico e incapacidad de amar.
  5. Gran pobreza de reacciones afectivas básicas.
  6. Vida sexual impersonal, trivial y poco integrada.
  7. Falta de sentimientos de culpa y de vergüenza.
  8. Indigno de confianza.
  9. Mentiras e insinceridad.
  10. Pérdida específica de la intuición.
  11. Incapacidad para seguir cualquier plan de vida.
  12. Conducta antisocial sin aparente remordimiento.
  13. Amenazas de suicidio raramente cumplidas.
  14. Razonamiento insuficiente o carencia de capacidad para aprender de la experiencia vivida.
  15. Irresponsabilidad en las relaciones interpersonales.
  16. Comportamiento fantástico y poco regulable en el consumo de alcohol y drogas.

Nos gustaría no tener que escribir este tipo de posts pero de todos es sabido que este tipo de situaciones forman parte de nuestra vida cotidiana, el señor del parking, el carnicero, el frutero, tu jefa, tu compañero de trabajo, tu profe de gimnasio, no siempre coincides con muchos y cuanto más los identificas más lejos te sitúas de ellos, afortunadamente.

Pedro García Aguado y la motivación por el cambio

Leíamos esta mañana en el blog de Pedro Gacía Aguado, coaching personal, visto ahora en la cadena de televisión Cuatro bajo el nombre del programa Hermano Mayor, bien, ha publicado una entrada sobre un listado de películas sobre valores motivacionales para la superación personal.

Os dejamos su listado y queremos agradecerle de forma personal el valor, la motivación y el coraje que demuestra a diario en sus numerosas charlas, en sus libros y en el trato personal que siempre ofrece, Pedro eres un grande.

  • 127 Horas.
  • Solo ellos
  • Billy elliot
  • El truco del manco
  • El imperio del sol
  • El diario de Noa
  • Efectos personales
  • Torre de Babel
  • Cadena de Favores
  • Señor de las moscas
  • Willi Wonka y la fabrica de chocolate
  • Precious
  • Guerrero pacifico
  • La vida en juego
  • Cuando menos te lo esperas
  • Mejor imposible
  • El color purpura
  • The fighter
  • Una mente maravillosa
  • Y tu quien eres
  • Cadena de favores
  • La terminal
  • Siete almas
  • La decision de anne
  • Forrest Gump,
  • La Lista de Schindler
  • Cuando el río crece.
  • Braveheart.
  • Cometas en el cielo.
  • Good Will Hunting
  • When a man loves a woman
  • El Mago de Oz
  • Muchas gracias Mr. Scrooge
  • Descubriendo a Forrester
  • El Bar Coyote
  • Cadena perpetua
  • Esta tierra es mía
  • La Gran Ilusión
  • Jerry Maguire
  • Entre Copas
  • Erin Brokovich
  • Mumford
  • Invictus
  • El hombre que mató a Liberty Valance
  • Hombres de Honor
  • SOBREVIVIRÉ
  • La vida es bella
  • Dias de vino y rosas
  • Elegir un amo
  • Yo soy Sam
  • Un mundo maravilloso
  • 28 días
  • Diario de la calle
  • La vida en juego
  • American History X
  • Ciudad de Dios
  • 300
  • Peter pan
  • Robots
  • V de vendetta
  • En busca de la felicidad
  • Babel
  • Noviembre
  • Gattaca
  • Hijos de dios
  • Añadimos un corto precioso a la par que duro: El circo de la mariposa<

    En mi caso, además de que me encante su programa y lo vea cada viernes y lo comente con mi pareja, quiero destacar varias cosas de su actitud que denotan una tranquilidad y confianza que la transmite solo con verle, Pedro no parece estar alterado, tiene la situación bajo control y cuando ve que las cosas se descarrilan y los que tienen delante se descontrolan, toma distancia.

    Les deja desahogarse y luego les pregunta de forma MUY inteligente qué ha pasado de forma previa para que explotaran y no pudiesen ni siquiera escuchar sus palabras de apoyo.

    No soy muy pro conductistas, mi amigo Raul 100% conductista me dice, a ver Selva para qué quieres estar 11 años de terapia… ¿para saber quiénes son los causantes de tu incomodidad? ¿para saber que tus padres son…?… AI! ME ENFADO MUCHO CON ÉL PORQUE PRIMERO, DEPENDE de tu situación personal, de tu reacción ante el tratamiento y lo único que compartimos y a pies juntillas es que sigas la terapia que sigas, el cambio está ahí, existe y solo necesitas motivación. Pero para conseguir esta motivación personal debes ser paciente y ser buen paciente, en varios sentidos, el primero el relacionado con la paciencia y el saber esperar, y el segundo, como paciente = «enfermo, carente de algo».

    Bueno aunque Raul, experto en PNL y yo tengamos nuestras diferencias en este sentido, él cree más en el cambio se plantea desde el cambio de conducta por «fuerzas externas», cambio de hábitos…  yo más bien creo que entender por qué te ocurre te hace cambiar la conducta, pero va a personas, casos, necesidades…

    Desde aquí nos gustaría poder hacerle una entrevista a Pedro para nuestro Blog, Pedro ¿te apuntas?

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